Explicación del Seguro de Carga

Un incendio químico en el barco de carga MV Express Pearl que zarpó de Colombo, Sri Lanka, en mayo del 2021 nos recordó que los productos valiosos se pueden perder y dañar en el tránsito, además de ser robados durante el transporte.

Estadísticamente, volar es la forma más segura de viajar, pero incluso el transporte aéreo puede sufrir pérdidas de carga y daños de vez en cuando. Entre los incidentes con gran repercusión, se incluye el vuelo de carga 8640 de Lufthansa del 2010, que aterrizó con mucha dureza en Riad, Arabia Saudita y se desbarató en la pista y provocó un incendio que destruyó la sección media del avión. El capitán y el primer oficial a bordo pudieron evacuar la aeronave, pero sufrieron lesiones.

Los accidentes terrestres representan importantes niveles de pérdida de carga cada año. Además, el robo de carga es una amenaza cada vez mayor, que ocurre en las paradas de camiones, los estacionamientos al costado de la carretera e incluso en estacionamientos para camiones. Se pueden secuestrar vehículos y tráileres a punta de pistola y, durante los descansos de los conductores, pueden abrir sus vehículos a la fuerza para vaciar su contenido. Los artículos que más se suelen robar son alimentos, bebidas, alcohol y tabaco, como también partes de autos y artículos electrónicos.

Los desastres ferroviarios son relativamente pocos e infrecuentes, pero hubo una seguidilla de descarrilamientos en marzo del 2021, por ejemplo. Más de 40 vagones que llevaban cargas mezcladas, incluidos materiales peligrosos, quedaron en la arena del desierto de Carolina del Sur. Otros 20 vagones de un tren de carga se descarrilaron en la región de Siberia, Rusia y más de 20 vagones se descarrilaron en Plymouth, MN, afortunadamente sin ocasionar lesiones. Y tan solo un par de semanas después, dos trenes de carga colisionaron en República Checa.

También se pierde carga durante el almacenamiento. La catastrófica explosión de almacenes del 2020 en el puerto de la ciudad de Beirut tuvo como resultado unos USD 15 000 millones en daños a la propiedad y trágicamente más de 200 muertos y 7500 lesionados.

Las pérdidas de carga de contenedores en cualquier año en particular pueden variar en gran medida. En el 2020, cuando el tráfico marítimo general fue significativamente menor por la pandemia del COVID-19, casi 2000 contenedores se perdieron en un solo incidente en diciembre - esta “masacre de carga” fue producto de UN barco con contenedores de Apus a 1600 millas náuticas del noroeste de Hawái.

Si consideramos el robo de carga, con los registros, se estima que el costo es de decenas de miles de millones de dólares en todo el mundo cada año. Si nos remontamos al 2015, el Instituto Británico de Estándares evaluó que los crímenes relacionados con cargas a nivel mundial tenían un costo de USD 22 600 millones y, más recientemente, con los análisis, se sugiere que solo en la actualidad en EE. UU. representan un problema de entre USD 15 000 y USD 30 000 millones de dólares.

En la región EMEA, los incidentes de robo de carga se duplicaron entre el 2018 y el 2019 (de 3981 a 8548 incidentes), con un valor promedio de USD 641 200 por “crímenes importantes relacionados con cargas”, según la Asociación de Protección de Activos de Transporte. En dos incidentes separados, se robaron partes de autos valuadas en más de USD 2 000 000 de camiones en Rumania y Alemania. Lo más espectacular de todo es que se robaron casi USD 21 millones en joyas y metales preciosos de una instalación en Sudáfrica.

Además de los desastres dignos de portadas y los crímenes marítimos, aéreos y terrestres, hay una gran cantidad de casos de pérdidas pequeñas y, a veces, bastante triviales. Aunque siempre hay que tomar medidas para protegerse ante la pérdida de carga, la posibilidad de sufrir pérdidas y daños es mucho mayor que la posibilidad de que se incendie una casa, por ejemplo.

Si un contenedor o algún elemento de la carga cae o se rompe, puede generar un daño físico al transporte. Otro riesgo es el daño por permanecer mojado, generalmente causado por la humedad, la condensación, la lluvia y el ingreso de agua de mar. Además, la carga se pude dañar por la contaminación y las plagas, y puede sufrir daños relacionados con la temperatura si los productos son perecederos. Y las amenazas oportunistas son un peligro constante.

Entre las razones de estos eventos de pérdida de carga, se pueden incluir empaques inadecuados o insuficientes para proteger la carga, el uso del tipo incorrecto de contenedor, no poder mantener la temperatura correcta y los ajustes de humedad en un contenedor con temperatura controlada, la sobrecarga y la distribución inadecuada del peso, además del etiquetado indebido - particularmente de productos peligrosos - lo que causa un almacenaje en bodega incorrecto y fallas de seguridad y supervisión.

Con todos estos riesgos en mente, se puede argumentar sólidamente para asegurar una buena póliza de seguro de carga, en lugar de confiar en las convenciones de compensación del transporte internacional.

Identificamos algunos eventos de carga catastróficos junto con otros más triviales que ocurren a diario en todo el mundo. La pérdida y los daños a la carga a menudo se deben a la negligencia, la falta de experiencia, la pereza y las formas de abaratar costos. Los descuidos, la poca atención a los detalles, el empaquetado insuficiente y los criminales oportunistas inevitablemente aumentarán el riesgo que corren los transportistas. Ahora, exploremos el gran riesgo financiero de confiar en las convenciones de compensación de los transportes internacionales en lugar de asegurar una buena póliza de seguro de carga.

De hecho, todo esto puede pasar cuando un envío internacional involucra varios puntos de manipulación. Durante un viaje, es posible que haya varios interesados o “manos” que entren en contacto con el envío.

Estos incluyen proveedores y contratistas que realicen la carga, así como proveedores de logística que entreguen la carga a los almacenes de los centros y de allí en adelante, desde el almacén hasta el puerto marítimo o la terminal del aeropuerto, por ejemplo. Además, hay estibadores que mueven los productos en el puerto o el aeropuerto y hacia el buque o el avión. Además de esto, los oficiales aduaneros deben revisar y procesar la carga y transportarla entre almacenes aduaneros. Y cuando los productos finalmente lleguen a su país de destino, a menudo necesitarán un viaje final en camión para llegar al destinatario.

A pesar de que hay convenciones internacionales de compensación cuando se daña o se pierde una carga, el pago es mucho menor que el valor de los productos. Esto se debe a que los reembolsos por responsabilidad de la carga generalmente se basan en su peso y no en su valor. Y, esencialmente, el dueño de la carga debe demostrar la negligencia del transportista, un proceso acusatorio que puede tardar meses y, por lógica, siempre excluirá cualquier tipo de desastre natural o caso fortuito por el que el transportista no se pueda responsabilizar.

Para entender el motivo por el cual los transportistas necesitan una póliza de seguro de carga, demos un vistazo a la brecha entre la compensación sin seguro (según las convenciones de responsabilidad de transporte internacional y basadas en el peso de la carga) y la compensación con seguro (según el valor total de la carga). Los cálculos de compensación difieren según el modo de transporte, así que aquí hay dos ejemplos - uno involucra el transporte aéreo y el otro el transporte marítimo.

En nuestro primer ejemplo, se transportan dos máquinas de molienda con un peso combinado de 2850 kg y se pierden en el camino. Si suponemos que el transportista es declarado responsable y la reclamación está sujeta a la responsabilidad por la carga, según las reglas de La Haya-Visby basadas en el peso, el consignador recibirá solo USD 7980 de compensación, mucho menos que el valor real de las máquinas. Pero si se cuenta con una póliza de seguro de carga, el consignador recibirá el valor toral de ambas máquinas como compensación, y no incurriría en una pérdida financiera para su negocio. Hay una gran diferencia entre USD 7980 y USD 70 000.

En nuestro segundo ejemplo, se destruyó por completo un envío de accesorios y bolsos lujosos durante el tránsito aéreo. Con este envío, el valor de la carga es alto, pero el peso es relativamente bajo - los bienes valen USD 120 000 y el envío total pesa 1560 kg. Una vez más, supongamos que el transportista es responsable y la reclamación está sujeta a la responsabilidad del transporte, esta vez según la Convención de Montreal. Sin seguro, el consignador recibiría una compensación de apenas USD 34 320, pero con una póliza de seguro de carga, recibiría USD 120 000.

Cuando no tiene una póliza de seguro de carga, obtener una compensación puede tardar mucho y distraer a su equipo de envíos de sus demás tareas importantes, sin la garantía de tener éxito. Por lo que tiene sentido al menos considerar asegurar su carga antes de transportarla, sin importar cuán trivial parezca.